

El otro día me comentaba un amigo que los resfriados e infecciones de garganta de esta época del año son los que más tardan en marcharse del cuerpo, quizás por los cambios constantes de temperatura, o quizás porque se van juntando los mocos del resfriado con los mocos de las alergias al polen. No sé si es cierto o no, pero puedo constatar que mis niños llevan varias semanas con “bogeys” y “la garganta picá” (son pequeños todavía y mezclan los dos idiomas). Y son ellos, en parte, que han inspirado la entrada de hoy, pues hoy vamos a hablar de esa garganta y de una palabra polisémica del inglés médico: “swab”. Y es que, si nos toca hablar de una muestra faríngea, deberíamos saber que esa muestra la obtendríamos con un hisopo, o “swab” en inglés. Pero también cabe destacar que esta palabra “swab” se emplea no sólo para referirse al hisopo, sino también para referirse a la muestra obtenida con un hisopo o al frotis preparado con la muestra. En este contexto de la garganta, podemos hablar de un “throat swab” o “throat swab culture”, y aunque en inglés repetimos la palabra “swab”, en castellano esta herramienta de diagnóstico se expresaría con exudado o cultivo faríngeo. La palabra “swab” funciona de la misma manera con la obtención de muestras y los portaobjetos empleados con otras partes del cuerpo, como por ejemplo “urethral swab” y “wound swab”.
A la hora de prepararle al paciente para este tipo de toma de muestra, podríamos igualmente usar la palabra “cotton bud”, la cual es muy frecuente en Reino Unido, e incluso más fácilmente entendido entre los pacientes. A continuación, os pongo un ejemplo de diálogo entre un enfermero y su paciente en el cual le explica cómo se va a llevar a cabo la toma de la muestra:

Como véis, en el diálogo, el enfermero adapta su lenguaje al paciente, teniendo en cuenta que “swab” suena más técnico. Hace lo mismo con el uso de “push down on your tongue” en lugar de “depress your tongue”, y “lolly stick” en lugar de “tongue depressor”. Lo incluyo porque, como he mencionado en otras entradas, es importante adecuar el lenguaje al paciente para facilitar su comprensión y fomentar su colaboración.
Pero volvamos a “swab” para terminar esta entrada pues tengo que contaros que la polisemia de esta palabra no se limita a la microbiología y los significados que acabo de mencionar, sino que también es una palabra empleada en el campo de la cirugía. En este contexto, “swab” se refiere al material quirúrgica, y más concretamente a las gasas o compresas quirúrgicas.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy y que os anime a echarle un vistazo al próximo taller sobre las muestras y analíticas que celebramos a finales de este mes. ¡Feliz martes!