Los días 2, 3 y 4 de julio tuvieron lugar las VIII Jornadas Internacionales de Traducción Jurídica en la Universidad Jaume I, coordinadas por Anabel Borja. Tuve el honor de que Anabel me invitara como ponente a dichas jornadas, en las que participé con dos ponencias, una sobre la traducción del formulario de demanda de divorcio inglesa (taller práctico) y otra sobre herramientas 2.0 para traductores, que es la que vengo a resumir y a compartir en este post. La experiencia ha resultado tremendamente positiva y me reafirma en la importancia profesional de moverse, conectarse, empatizar. Anabel y su equipo compusieron un panel de ponentes con los que fue todo un lujo compartir cartel y buenos momentos. Un agradecimiento muy especial para Anabel, cuya amabilidad y proximidad son un verdadero lujo.
En mi presentación hice un primer test par comprobar los conocimientos de los asistentes sobre la Web 2.0 por contraste con la Web 1.0 y sobre las distintas herramientas que tenemos disponibles en internet para fines diversos. Dividí el impacto de la Web 2.0 en cuatro áreas fundamentales:
- Documentación 2.0
- Formación 2.0
- Preparación 2.0
- Marketing 2.0
En cuanto a la documentación, señalé fundamentalmente la posibilidad de acceder a literatura técnico-científica (en este caso jurídica) de primera mano gracias a internet. Insistí en la idea de Alicia Martorell de que ya no se justifica traducir algo que no se entiende gracias a que hoy todo término o concepto lo podemos ver en contexto. Los diccionarios bilingües son manifiestamente insuficentes para mostrarnos la complejidad de una realidad concreta. En definitiva, ya no nos documentamos como antes, ya no traducimos como antes. Se impone un nuevo concepto de calidad en la traducción para el que hay que estar preparaados.
En materia de formación, qué duda cabe que internet ha permitido un cambio de escala, hoy el aula está en cualquier parte, está en nuestro Twitter, en los blogs… En definitiva, cada uno creamos nuestros PLEs: Personal Learning Environments. Además están los cursos en línea, cada vez más populares y con un camino hacia la calidad aún por recorrer pero con ejemplos realmente estupendos de lo que se puede aprender superando barreras geográficas.
El tercer punto que toqué fue la idea de la preparación 2.0, recogiendo ideas de Clara Guelbenzu. Si pensamos en las galerías multimedia de múltiples organismos y empresas, practicar la interpretación judicial metiendo horas de cabina sin tener cabina es algo al alcance hoy de todos/as con videos de juicios de Youtube u otros portales especializados.
Finalmente, me referí al Marketing 2.0. Las redes sociales, han supuesto la democratización del marketing: todos podemos estar visibles gracias a herramientas gratuitas y de fácil manejo. Invertir en marketing ya no es sólo un privilegio de las grandes agencias. En la sesión hicimos varias búsquedas en Google para comprobar resultados y les insistí en la importancia y la posibilidad de que alguien les encuentre cuando hace una búsqueda de traductores jurídicos en internet.
Terminé mi presentación con una enumeración y demostración de herramientas sencillas al alcance de todos y que nos permiten estar presentes en la red para que nos encuentren.
Os dejo con la presentación que empleé como apoyo visual de mi ponencia. También podéis ver los vídeos de mis presentaciones aquí y las fotos de las jornadas en este otro enlace.